El ejercicio con la bicicleta estática tiene tres funciones principales:

1. Favorecer el buen funcionamiento de nuestro sistema cardiovascular. La estática imita bien la experiencia de una bicicleta de calle, lo que hace que mejore notablemente nuestra salud cardiovascular y nuestra resistencia.

2. Fortalecer toda la musculatura del tren inferior : cadera, muslos y piernas. La musculatura de las piernas se fortalece bastante rápido con un entrenamiento normal (3 veces al día durante 40 o 45 min).

3. Quemar calorías para eliminar la grasa corporal. No hace que adelgacemos milagrosamente, ya que la pérdida de peso depende de numerosos factores, pero sí favorece notablemente la pérdida de grasa corporal. Para disminuir la grasa de nuestro vientre, nalgas, etc., hay que combinar otro tipo de ejercicios más específicos para zonas concretas.

La estática está indicada a todas las edades, incluso para quienes no tienen costumbre de utilizar una bicicleta de calle, ya que ni siquiera hay que mantener el equilibrio, pues es totalmente estable.

Está muy recomendada para recuperarse de algunos tipos de lesiones bajo control médico.

• La bicicleta estática es muy diferente de la bicicleta de paseo, porque tiene funciones que no tiene la bici de calle, como el volante de inercia, el cuadro de mandos, posibilidad de respaldo, etc., pero está probada su eficacia para realizar las funciones antes comentadas, pues veinte minutos de estática pueden equivaler a unos veinticinco minutos de carrera pero con la ventaja de no tener que recibir el impacto de arrancadas y frenazos sobre nuestras articulaciones.
• Otra de las ventajas de la bicicleta estática es que podemos tenerla en casa, bien instalada de forma permanente en algún espacio dedicado a nuestro pequeño lugar de gimnasia o, si es plegable, sacándola en cualquier momento para usarla en un rincón de la casa. Hay estáticas plegables que pesan muy poco y se pueden guardar en cualquier lugar, como debajo de una cama o detrás de una puerta.
• La bici en casa evita tener que desplazarse al gimnasio, con ahorro de tiempo y de dinero, además de la comodidad de poder hacerlo tranquilamente, sin tener que hacer colas, con la música de fondo que nos guste o delante de la tele viendo recorridos grabados y rutas que podemos encontrar en Internet. La estática para casa se convertirá en un elemento aceptado por los componentes de la familia que beneficiará la salud de todos.

Las partes fundamentales de una bicicleta estática son las siguientes:

1. El marco de suspensión o chasis, que es la estructura metálica básica donde van encajando los demás elementos.
2. Las patas de estabilizadoras, que sostienen a la bicicleta sobre el suelo y se unen al chasis para darle estabilidad.
3. Las ruedas de transporte (si las lleva) para poder desplazar la bicicleta con facilidad, cuando queramos reubicarla o guardarla.
4. El manillar, que es regulable, puede ser también inclinable, y sobre él suele ir la consola de control; y también puede llevar los sensores de frecuencia cardiaca.
5. El sillín, sobre el que nos sentamos y que suele ser regulable en altura y longitud (para acercarnos o alejarnos del manillar).
6. La consola de control de datos o monitor LCD, que nos muestra las calorías gastadas, kilómetros recorridos, pulsaciones, etc.
7. El eje con los pedales, que permiten mover el mecanismo de rodada.
8. El volante de inercia que va unido al mecanismo de pedaleo por una transmisión que puede ser de cadena o de cinta. Es una rueda que puede pesar entre 15 y 25 Kg, que hace que el pedaleo sea más suave evitando arranques y paradas bruscas, a la vez que determina el esfuerzo realizado al pedalear, acumulando energía cinética que transmitimos y proporciona la sensación de pedalear en una bicicleta de calle.
9. El regulador de resistencia, que permite seleccionar distintos modos de dureza o dificultad de pedaleo.

Tipos de estáticas

Spinning vs estática clásica